sábado, 23 de mayo de 2009



Comprendo que le temas al espejo.
Lo
miro de reojo, igual que vos.
Que esto no es lo suficientemente
firme y
curvo y esto no está aún del todo plano.
Comprendo que le temas al verano.
Septiembre me preocupa como a vos.
La histeria de llegar a enero para
gustarle al mundo entero,
para gustarle al rubio escultural.
¿A quién
queremos engañar?
Si al final, nadie le escapa al tiempo.
Si al final,
sólo trasciende lo que sos.
¿Quién es feliz siempre tratando de
gustar?
La vida no me va esperar.
La vida no te va esperar.
Entiendo
que te indigne el nuevo aviso a mi me pone en llamas como a vos.
La modelo
agradeciendo su belleza a un yogurt.
Y a vos, que no te cierran tus medidas.
Entiendo que te sientas aturdida.
A veces me confundo como vos.
El
último bocado activa la culpa que traes escondida.
Y si ese chocolate te
venció,
tal vez deba salir por donde entró.
Si al final, nadie le escapa
al tiempo.
Si al final, sólo trasciende lo que sos.
¿Quién es feliz
siempre tratando de gustar?
La vida no me va esperar.
La vida no te va
esperar.
(bis) Entiendo que te sientas aturdida.
A veces me confundo como voz